Explicación:Los dones espirituales son capacidades especiales otorgadas por el Espíritu Santo a los creyentes para edificación del cuerpo de Cristo, es decir, la iglesia. Estos dones no son habilidades naturales, sino manifestaciones sobrenaturales del poder de Dios con el propósito de servir, enseñar, guiar y fortalecer la fe de otros.La Biblia menciona diversos dones espirituales en libros como Romanos 12, 1 Corintios 12 y Efesios 4. Entre ellos están la sabiduría, la palabra de conocimiento, la fe, los dones de sanidad, el hacer milagros, la profecía, el discernimiento de espíritus, el hablar en lenguas y la interpretación de lenguas. También se consideran dones el servicio, la enseñanza, la exhortación, el dar con generosidad, la dirección y la misericordia.Cada creyente recibe al menos un don espiritual, y estos deben usarse con humildad y amor, no para exaltación personal, sino para glorificar a Dios y ayudar al prójimo. Es fundamental buscar dirección divina para descubrir y desarrollar los dones recibidos.El apóstol Pablo enseña que, aunque hay muchos dones, todos provienen del mismo Espíritu y deben usarse en unidad y armonía. El mayor de todos, sin embargo,