Respuesta:Yo sé que mi conocimiento es verdadero cuando puedo comprobarlo con hechos o pruebas. No basta con que alguien lo diga, también debo entenderlo y razonarlo. Si lo que sé se puede explicar, justificar y además coincide con la realidad, entonces puedo confiar en que es verdadero. También me doy cuenta de que el conocimiento puede cambiar, porque siempre aparecen nuevas ideas o descubrimientos que lo corrigen. Por eso creo que la verdad no es algo absoluto, sino que se fortalece cuando se pone a prueba y resiste la duda.