Respuesta:En la parábola del buen samaritano (Lucas 10:25-37), los ladrones asaltaron al hombre, lo despojaron de sus pertenencias, lo hirieron gravemente y lo dejaron medio muerto en el camino. La parábola se centra en la falta de compasión de otros que pasaron por allí, como el sacerdote y el levita, y la posterior acción compasiva del samaritano, quien se detuvo a ayudar al hombre herido. Explicación: