En julio de 2022, arrancó la competencia comercial entre los multimillonarios Richard Branson y Jeff Bezos para llevar turistas al espacio. Aunque hay personas que aplauden esas iniciativas , pienso que es una actitud equivocada. Creo que es porque muy pocas personas saben que estas serán diversiones de solo unos cuantos minutos, pero cuyas consecuencias ambientales representarán daños incalculables para el planeta. Las emisiones de CO, de cuatro turistas en uno de esos vuelos espaciales serán entre 50 y 100 veces más que las que generan en un vuelo comercial de larga distancia. ¿Quién se hará cargo de ese deterioro del ambiente? Considero que es demasiado grande ese riesgo a cambio de un pasatiempo que solamente unos cuantos millonarios más podrán permitirse disfrutar. ara profundizar en este prendizaje, puedes consultar: Hecho 1: G. sexto grado, páginas 110 a 121. Hecho 2: Hecho 3: Hecho 4: Quiero saber más