Respuesta:De dos a tres copas.Explicación:La cantidad específica puede variar dependiendo de factores individuales, como la tolerancia al alcohol, el tipo de bebida, el tiempo de consumo y la frecuencia con la que la persona suele beber. Sin embargo, de forma general, se considera que unas tres copas pueden ser suficientes para causar un cambio en el comportamiento observable en la mayoría de las personas.