Antonio Ramírez Oré es un taxista de 21 años. Tenía pensado retornar temprano a casa, pero el martes último la alegría que sentía por estar al lado de sus padres, se esfumó. Fue intervenido por una patrulla policial en el Rímac por un robo cometido en Huánuco, supuestamente por él, en el 2005. En ese entonces Toño, como lo llaman de cariño, contaba con 13 años y estudiaba en Lima. Se trató de un caso de homonimia que le costó casi 24 horas de detención en la División de Requisitorias. Como el ca