Respuesta:En pocas palabras: aunque ambos tengan el mismo IMC, la composición corporal cambia completamente la historia de salud.Caso A (45% músculo): Obesa según IMC, pero metabólicamente más “resistente”, con mejor fuerza y menor riesgo de complicaciones.Caso B (28% músculo): Obesa con mucha menos masa muscular → mayor riesgo de problemas metabólicos y funcionales, incluso si el peso total es igual.